jueves, 18 de marzo de 2010

No es un fracasado, es más sabio

No es un fracasado, es más sabio. Han mirado al fracaso de frente. Se cansaron de trabajar para otros y apostaron todo su patrimonio y hasta sus relaciones personales para crear la empresa con la que soñaban. Pero no funcionó. Tuvieron que cerrarla. Una pesadilla de deudas y despidos. Y después, ¿qué? La mayoría vuelve al mercado laboral por cuenta ajena. Pero a algunos, a pesar de todo, aún les quedan ganas de volver a intentarlo. Son emprendedores que buscan una segunda oportunidad. Pero en la mayoría de los casos no les llegará. Los bancos ya no se fían de ellos. La sociedad no está dispuesta a perdonar el fallo. Los emprendedores españoles se lo juegan todo a una carta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario